La capilla domiciliaria de la Virgen de Castilviejo
En breves días tendrá lugar el traslado de la Virgen de Castilviejo desde su ermita a la parroquia de Santa María, aunque este año 2021 debido a las restricciones sanitarias, el acto se realizará de manera mucho más discreta a como se venía haciendo desde tiempos inmemoriales.
Ésta no es la única visita que la patrona de la ciudad realiza a sus habitantes porque como hemos visto en anteriores artículos, su presencia en Rioseco se materializaba siempre que la localidad pasaba por apuros, ya fuera por falta de lluvias que regaran los campos, por plagas que asolaran cosechas o guerras o pestes.
Entre medias, los riosecanos siempre podían rezar frente a la milagrosa imagen yendo en peregrinación a su santuario. Pero también desde sus hogares, invitando a entrar en ellos a la pequeña imagen que representaba a la Patrona riosecana resguardada dentro en una urna portátil.
Procesión de la Virgen y el Cristo de Castilviejo, durante los años 30 del siglo pasado
La escultura procesiona hoy adornada tan sólo por una diadema de rayos y la medalla de oro de Medina de Rioseco, aunque su hermandad sigue conservando la colección de ropa y joyas con la que se engalaba en otras épocas.